Masa de levadura:
1 cebolla
1 diente de ajo
200 g de col lombarda o repollo
2 cucharadas soperas de aceite para cocinar (p. ej., aceite de girasol)
1 cucharadita de comino molido
Sal
Pimienta recién molida
400 g de harina de espelta integral
200 g de harina de trigo (tipo 550)
2 sobres de levadura seca
2 cucharadas soperas de melaza
2 cucharaditas de sal
150 g de yogur
300 ml de agua caliente
50 g de pipas de girasol
50 g de semillas de lino
5 bayas de enebro
(pasarlas por un molinillo de especias)
Para espolvorear:
Pipas de girasol
Fácil de preparar
1. Picar la cebolla y el ajo. Cortar la col en trozos pequeños. Calentar el aceite en un cazo o una sartén, añadir la verdura y rehogarla durante aprox. 10 minutos. Condimentar con las especias y dejarla enfriar un poco.
2. En un cuenco, mezclar la harina con la levadura en polvo con cuidado. Añadir el resto de ingredientes excepto la col y amasar con una batidora con ganchos de amasar; primero brevemente con la mínima potencia y después a máxima potencia hasta obtener una masa homogénea. Incorporar la col.
3. Cubrir la masa y dejarla reposar en un lugar cálido hasta que haya aumentado visiblemente de tamaño.
4. Volver a amasar la masa brevemente sobre una superficie ligeramente enharinada, formar un rollo con ella y meterla en el molde (30 x 11 cm). Cubrir el pan y dejarlo reposar de nuevo.
5. Pincelar la parte superior con un poco de agua y hacer varios cortes diagonales de aprox. 1 cm de profundidad con un cuchillo afilado. Espolvorear pipas de girasol por encima.
6. Introducir el molde en el horno precalentado (calor arriba y abajo: 200 °C, aire caliente: 180 °C). El pan estará listo al cabo de aprox. 50 minutos.
7. Volcarlo sobre una rejilla y dejarlo enfriar.